domingo, 12 de abril de 2015

La Salud, ¡lo primero!


La cooperación del futuro en salud




La salud es un bien común, un bien público considerado uno de los objetivos del milenio (probablemente el más importante para todos nosotros) y, afortunadamente y en general, la situación sanitaria europea ha mejorado considerablemente en los últimos años: el número de médicos y enfermeros per cápita es más alto que nunca en la mayoría de los países y ha aumentado la esperanza de vida, además de que la mayor parte de los países europeos ha reducido el consumo de tabaco.

Cuando hablamos de 'salud como objetivo del milenio', nos referimos a que el principal reto que se propone Europa hablando en términos sanitarios es combatir el VIH, la malaria y otras enfermedades:



-META 1
Haber detenido y comenzado a reducir la propagación del VIH/SIDA en 2015

-META 2
Lograr, para 2010, el acceso universal al tratamiento del VIH/SIDA de todas las personas que lo necesiten.

Una cuarta parte de los habitantes de Botswana vive en áreas rurales. A fin de detener la proliferación del VIH/SIDA, sus remotos poblados están siendo visitados por unidades móviles de análisis en un intento por revertir la situación en este país, considerado el Segundo con mayor prevalencia. En este video podemos ver como estas unidades móviles salvan la vida de muchas personas, sobre todo mujeres que no pueden desplazarse de sus poblados o que no tienen suficiente dinero para viajar.






-META 3
Haber detenido y comenzado a reducir, en 2015, la incidencia de la malaria y otras enfermedades graves


En un mundo interconectado como el actual, la salud de unos es importante para la salud de todos, y es indispensable tener claro que la cooperación es imprescindible para el intercambio de conocimientos, ya que nos beneficia a todos. Esto es lo que se debería impulsar, el intercambio de ideas, ya que el modelo de cooperación actual ha quedado obsoleto. La transferencia de recursos ya no sirve, lo que necesitan ahora mismo los países en desarrollo, son los conocimientos del primer mundo. Esa ayuda se ha convertido en un mecanismo para resolver a distancia los problemas de los países desarrollados. La ayuda nos permite financiar la lucha contra enfermedades pero también evitar en último término que esas enfermedades lleguen a los países desarrollados con el riesgo que esto supone para nuestras propias poblaciones. Un ejemplo son los conocimientos transferidos a Mozambique desde España, que han significado el desarrollo de un bien público, una vacuna contra la malaria. Han generado recursos de investigación en España y al mismo tiempo han desarrollando un conocimiento del que nos beneficiamos mutuamente países pobres y países ricos.

La finalidad de la cooperación no es sustituir el papel de los gobiernos de  los propios países de resolver sus propios problemas. Tampoco podrá resolver problemas graves que los países lleven décadas acarreando, pero si que puede complementar las políticas nacionales.
La meta es globalizar la cooperación y ya no hablamos de hacer cooperación para los países pobres, sino de una cooperación entre países para mejorar la vida de todas aquellas personas, sean de países ricos o de países pobres, que quedan excluidas de todos esos servicios básicos.

Un importante beneficio propuesto por la UE con el que contamos los europeos es la Tarjeta Sanitaria Europea, que permite, en caso de vacaciones o viajes de trabajo, atención sanitaria al mismo precio que la población local. 
La UE también contribuye a la defensa de Europa contra las enfermedades infecciosas. Una agencia de la union europea, (la ECDC), se encarga de reunir los conocimientos acumulados en Europa en materia de salud con vistas a elaborar consejos sobre lo riesgos de las enfermedades infecciosas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario